En la mañana del día de hoy me acerco, dando un paseo, a comprar el pan. Durante el trayecto llama mi atención lo sucias y llenas de desperdicios que se encuentran las calles por las que transito, así como los contenedores de reciclado de papel y vidrio.
En relación a los desperdicios, y otros múltiples tipos de objetos y recipientes esparcidos por el suelo, centran mi atención, por su cantidad, los que se encuentran al lado del muro sito en la puerta de acceso al colegio de las Josefinas, en su parte externa; junto a un pequeño descampado en el que a unos metros se ubica un kiosco de golosinas. También se pueden ver desperdicios de envases, bolsas, etc... frente a ese mismo colegio, en la curva de la rotonda, al lado de la parada de autobús, bajo el indicador de señales.
Sobre los contenedores de reciclado de papel y vidrio que están a rebosar, con cajas y bolsas sobre ellos y en su entorno, sirvan como ejemplo los ubicados en el acceso a la avenida de Extremadura, frente a la farmacia y al instituto “Pérez Comendador”.
Por higiene y por respeto al ciudadano convendría dar, a quien competa, una limpia a Plasencia.
Por Javier Caso Iglesias. Plasencia (Cáceres)
En relación a los desperdicios, y otros múltiples tipos de objetos y recipientes esparcidos por el suelo, centran mi atención, por su cantidad, los que se encuentran al lado del muro sito en la puerta de acceso al colegio de las Josefinas, en su parte externa; junto a un pequeño descampado en el que a unos metros se ubica un kiosco de golosinas. También se pueden ver desperdicios de envases, bolsas, etc... frente a ese mismo colegio, en la curva de la rotonda, al lado de la parada de autobús, bajo el indicador de señales.
Sobre los contenedores de reciclado de papel y vidrio que están a rebosar, con cajas y bolsas sobre ellos y en su entorno, sirvan como ejemplo los ubicados en el acceso a la avenida de Extremadura, frente a la farmacia y al instituto “Pérez Comendador”.
Por higiene y por respeto al ciudadano convendría dar, a quien competa, una limpia a Plasencia.
Por Javier Caso Iglesias. Plasencia (Cáceres)
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