viernes, 7 de septiembre de 2007

Alumbrado, calles y parques en Ciudad Jardín

No se que ocurre con el alumbrado público de las calles Esparragosa y Amapola sitas en la barriada de Ciudad Jardín de Plasencia. El caso es que se encienden muy posteriormente al de todas las calles aledañas, cuando está muy entrada la noche y la oscuridad es total, por otra parte su apagado es muy anterior también al de las calles del entorno, cuando aún no ha amanecido, quedándose estas calles a esas horas como boca de lobo. La preocupación me surge porque dentro de pocos días los escolares han de desplazarse de sus casas a los colegios e institutos ubicados en las proximidades y, en caso de no poder ser acompañados por sus padres o familiares, estos sienten miedo de hacer solos el trayecto por calles poco transitadas a esas horas y oscuras, insisto, como boca de lobo.

Otra incidencia que me gustaría resaltar y que sufre esta nueva barriada de la ciudad es la no recogida a diario de los contenedores de recogida de plásticos y envases que se han ubicado. La gente de la zona es responsable y deposita en los citados contenedores de reciclado sus envases, recipientes y embalajes plásticos. Como consecuencia del no vaciado cuando están llenos, los actuales contenedores están colmados a rebosar y las bolsas con los envases se terminan colocando por los vecinos donde pueden, esto es, sobre estos, así como en el entorno de los mismos, dando un aspecto lamentable de la calle, pues terminan esparcidos por esta.

La tercera cuestión que expongo a los responsables municipales placentinos que esta comunicación puedan leer es la relativa al deterioro de los parques ubicados en nuestra barriada. Los jardines están muy descuidados, las farolas de estos tienen desprendidas sus tulipas del mástil metálico que las sostiene, colgando sus pantallas por los cables que le dan suministro de luz. En uno de estos parques, tras concluirse la obra en una parcela anexa, ha quedado una rampa y junto a ella un desnivel sin protección de varios metros por el que puede caer, produciéndoles graves lesiones, cualquier niño o anciano.

Fdo.: Javier Caso Iglesias. Plasencia (Cáceres)

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