viernes, 24 de octubre de 2008

Egipto, sonidos de alta frecuencia y diapasones

Después de examinar bloques que habían sido vaciados -con alguna clase de taladradora- en el Templo del Valle, el ingeniero Christopher P. Dunn afirma que las marcas de la taladradora que quedan en el agujero demuestran que la herramienta cortaba la roca a razón de unos dos milímetros y pico por cada revolución y señala que esta fenomenal velocidad no podía alcanzarse accionando la herramienta a mano.

Sir William Matthew Flinders Petrie, importante egiptólogo británico, opinaba que sí podía alcanzarse, pero sólo si se aplicaba una presión de más de una tonelada a la taladradora... aunque no queda claro cómo podía aplicarse.

Una compañía de Illinois que está especializada en perforar granito dijo a Dunn que sus taladradoras -que giran a razón de 900 revoluciones por minuto- sólo lo cortan a razón de 2,54 micras por revolución, de manera que en teoría los antiguos egipcios debían de usar una taladradora que era 500 veces más rápida que una moderna.

Otro aspecto del problema hizo que Dunn empezara a vislumbrar la solución. Un agujero abierto en una roca que era una mezcla de cuarzo y feldespato demostró que la «taladradora» había cortado el cuarzo con más rapidez que el feldespato, aunque aquél es más duro que éste. La solución que sugiere Dunn casi resulta increíble. Señala que el moderno maquinado ultrasónico utiliza una herramienta que depende de la vibración.

El martillo neumático que usan los peones se basa en el mismo principio: un martillo que sube y baja a una velocidad tremenda y descarga cientos de golpes por minuto sobre la superficie que hay que romper. Lo mismo cabe decir de la taladradora. La broca de una herramienta ultrasónica vibra miles de veces más rápidamente.

Los cristales de cuarzo se usan en la producción de ultrasonido y, a la inversa, responden a la vibración ultrasónica. Esto explicaría por qué la «broca» cortaba el cuarzo más rápidamente que el feldespato.

Hay que reconocer que lo que se sugiere parece absurdo: que los egipcios tenían alguna fuerza tan potente como nuestra electricidad y que dicha fuerza se basaba en el sonido. Todos hemos oído contar que Caruso rompía un cristal cantando cierta nota a gran volumen.

También podemos ver que si se instalara una taladradora puntiaguda en una de las puntas de un diapasón gigantesco, teóricamente podría cortar un bloque de granito tan fácilmente como una moderna taladradora giratoria.

En efecto, lo que hace Dunn es sugerir que los egipcios disponían de una tecnología basada en el sonido de alta frecuencia. Pero debo reconocer que no comprendo exactamente cómo pudo utilizarse esta fuerza para accionar la hoja de casi tres metros de longitud de la sierra de bronce que cortó el sarcófago que hay en la Cámara del Rey.

Extracto del libro de Wilson Colin "El mensaje oculto de la esfinge"

5 comentarios:

  1. Javier, ¿sabes que en la base enterrada de la esfinge hay caracoles, camarones y otros restos marinos?
    Ni fueron los primeros ni serán los últimos. Sabemos muy poco, demasiado poco. ¿Qué restos quedarán de nuestra civilización dentro de 5 o 6000 años?
    Otra cosa, disculpa esta intromisión mandamé un correo a benignolopez@wanadoo.es para poder mandarte una invitación como gestor del blog que hemos creado sólo de Buenas Noticias "telebuenas.blogspot.com, algunos amigos ya están. Un saludo. Malo Malísimo

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  2. Es posible, por Resonancia. Sabrás que un puente se puede derribar sin necesidad de bombas o explosivos, basta con hacerlo vibrar a la frecuencia en la que entra en resonancia, es decir al límite de sus resistencia mecánica.
    Lo que no imagino es cómo hacían que vibraran las piedras hasta alcanzar esa resonancia. Ya nos lo dirás.

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    1. En los grabados en piedra aparece esa herramienta, el diapasón.

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  3. juer javier, me encanta la egiptología, ultimamente me tienes emocinada con estos post, juer paco amigo, contigo se aprende algo nuevo todos los días...malo, creo que eres una persona excepcional y con una sabiduría sin límites, me tienes fascinada, además es que eres un encanto.

    Javier, tienes la capacidad de sorprenderme, cuando ya pensaba que pocas cosas lo harían, es un placer encontrar a una persona tan inquieta, y con ganas de aprender siempre.

    besitos, estoy agotada, me voy a mimir, que me llama morfeo, muakssss

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  4. Hola amig@s, hola Malo Malísimo, hola Paco Centeno, hola Satine:

    Estos egipci@s eran un peligro, entre mariscadas como dice Malo Malísimo y el vibrador en danza como aporta Paco Centeno, no había quien los parara.

    Satine, la verdad es que a mi también me sorprenden cada día más las civilizaciones antiguas, sobre todo tras las aportaciones de nuestros dos magníficos compañeros.

    Recibid un abrazote amig@s.

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