En el día de hoy he podido constatar, en la práctica, la certeza de estos pensamientos. En el día de hoy he sido testigo activo y partícipe de como los responsables de diferentes niveles de la administración regional se acercan a los trabajadores -a esos que día a día conviven y dan respuesta a las cuestiones y requerimientos que las personas demandan-, y se reunen con ellos, acordando conjuntamente que metodologías de organización y de trabajo son las más eficaces para garantizar servicios de máxima calidad a los ciudadanos.
Este quiere ser un testimonio de como el "cambio sin cambio", que con los trabajadores de la Junta de Extremadura se comprometió a principio de legislatura su presidente y amigo Guillermo Fernández Vara, se va labrando camino sin prisas pero sin pausas; construyendo unas interrelaciones más cordiales, afectuosas y cercanas entre responsables administrativos y asalariados de la institución. "Cambio sin cambio" que es lo que todos queremos: firmeza en objetivos y delicadeza en las formas. Un proyecto, como dice Guillermo, "nada conformista y sumamente incluyente", "cambiando las formas de hacer de las personas, pero con permanencia de las ideas, los principios y las convicciones".
Ya se que a Guillermo le puede ruborizar tanto agradecimiento, pero como dicen en mi pueblo, "es de bien nacidos ser agradecidos" y como este me surge de forma natural, pues me lo pide un cuerpo ajado de tantas batallas, no me queda otra que expresarlo: Guillermo no cambies y gracias por ser como eres.
Fdo.: Javier Caso Iglesias. Plasencia (Cáceres)
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