Por Javier Caso Iglesias | Analista Político
En este artículo de opinión voy a tratar sobre un tema que suscita mucho interés, el relativo al comportamiento caracterológico de las personas alienadas por el poder. Es curioso ver cómo se comportan. Es un verdadero proceso, algo paranoide, de posesión arquetípica de la personalidad. Realidad que en Podemos, desafortunadamente, también se padece; en especial en la localidad y región en la que resido.
Nos dice la Wikipedia que el trastorno paranoide de la personalidad es un trastorno de personalidad caracterizado por un patrón de desconfianza y suspicacia general hacia los otros, de forma que las intenciones de estos son interpretadas como maliciosas. Este patrón empieza al principio de la edad adulta y aparece en diversos contextos. Tienen dudas injustificadas sobre la "lealtad" de sus amigos. Aparentan ser fríos, pero en realidad sólo es un intento de evitar que los demás conozcan sus puntos débiles. Nunca olvidan una crítica. Sospechan sin base suficiente y tienen reticencia a confiar en los demás por temor injustificado a que la información que compartan vaya a ser utilizada en su contra. Muestran preocupación por dudas no justificadas acerca de la lealtad o la fidelidad de los amigos y socios. En las observaciones o los hechos más inocentes vislumbran significados ocultos que son degradantes o amenazadores. Albergan rencores durante mucho tiempo, por ejemplo, no olvidan lo que ellos consideran insultos, injurias o desprecios. Perciben ataques a su persona o a su reputación que no son aparentes para los demás y están predispuestos a reaccionar con ira o a contraatacar.
Esto que la Wikipedia describe como trastorno paranoide de la personalidad es algo muy común en el modelo de relaciones actualmente existente en Podemos, en especial en la localidad y en la región en la que resido.
Por otra parte la Alienación Política, que también se padece por parte de los órganos de coordinación y dirección de Podemos, en especial en la localidad y en la región en la que resido, consiste en hacernos creer que la estructura organizativa del partido representa la conciliación de intereses ciudadanos generales cuando en realidad es un instrumento represivo (en su acepción de restrictivo) del grupo dominante.
Y, como se puede comprobar buscando en Internet el significado de Mandato Imperativo, al quedar nuestra representación política -la de los inscritos y votantes a Podemos- en manos de otros que la restringen y limitan, consecuencia de esa teoría jurídica que se llama la "Teoría del Mandato Imperativo" donde las personas, por el hecho de haber votado, ya no tienen derecho a nada hasta al cabo de cuatro años que pueden destituir a aquel señor y votar a otro. Pero mientras aquel señor tiene el "mandato imperativo", que es, repetimos, una entrega de nuestra soberanía, de nuestro poder, de nuestra capacidad de influir en la sociedad..., usan a su capricho nuestra dimensión política.
Nosotros no deseamos, como inscritos y votantes de Podemos, renunciar durante cuatro años a nuestra dimensión política. Por eso los que somos más alternativos tenemos la tendencia a la democracia directa y a suprimir estas delegaciones de representación política.
Este concepto de Alienación Política también describe la siguiente situación que le puede sobrevenir a un sujeto: cuando no se posee a sí mismo, cuando la actividad que realiza le anula, le hace salir de sí mismo y convertirse en otra cosa distinta a la que él mismo propiamente es, decimos que dicho sujeto está alienado; la alienación describe la existencia de una escisión dentro de un sujeto, de un no poseerse totalmente y, como consecuencia de ello, comportarse de un modo contrario a su propio ser.
Dado que nosotros no queremos esto, no queremos ser Alienados Políticos de ningún Consejo de Coordinación ni de ningún Consejo Ciudadano que se blinda a la ciudadanía y trata por Mandato Imperativo de imponer al conjunto de los inscritos de Podemos sus fantasmagorías y espejismos consecuencia de interpretar o contemplar la realidad al margen de la práxis, es decir, de las condiciones reales o materiales de la existencia humana; es por lo que demandamos más democracia interna, más democratizar y ciudadanizar las estructuras organizativas de Podemos, más transparencia y más, mucha más implicación de las personas excluidas de la organización, en especial en la localidad y en la región en la que resido.
En este artículo de opinión voy a tratar sobre un tema que suscita mucho interés, el relativo al comportamiento caracterológico de las personas alienadas por el poder. Es curioso ver cómo se comportan. Es un verdadero proceso, algo paranoide, de posesión arquetípica de la personalidad. Realidad que en Podemos, desafortunadamente, también se padece; en especial en la localidad y región en la que resido.
Nos dice la Wikipedia que el trastorno paranoide de la personalidad es un trastorno de personalidad caracterizado por un patrón de desconfianza y suspicacia general hacia los otros, de forma que las intenciones de estos son interpretadas como maliciosas. Este patrón empieza al principio de la edad adulta y aparece en diversos contextos. Tienen dudas injustificadas sobre la "lealtad" de sus amigos. Aparentan ser fríos, pero en realidad sólo es un intento de evitar que los demás conozcan sus puntos débiles. Nunca olvidan una crítica. Sospechan sin base suficiente y tienen reticencia a confiar en los demás por temor injustificado a que la información que compartan vaya a ser utilizada en su contra. Muestran preocupación por dudas no justificadas acerca de la lealtad o la fidelidad de los amigos y socios. En las observaciones o los hechos más inocentes vislumbran significados ocultos que son degradantes o amenazadores. Albergan rencores durante mucho tiempo, por ejemplo, no olvidan lo que ellos consideran insultos, injurias o desprecios. Perciben ataques a su persona o a su reputación que no son aparentes para los demás y están predispuestos a reaccionar con ira o a contraatacar.
Esto que la Wikipedia describe como trastorno paranoide de la personalidad es algo muy común en el modelo de relaciones actualmente existente en Podemos, en especial en la localidad y en la región en la que resido.
Por otra parte la Alienación Política, que también se padece por parte de los órganos de coordinación y dirección de Podemos, en especial en la localidad y en la región en la que resido, consiste en hacernos creer que la estructura organizativa del partido representa la conciliación de intereses ciudadanos generales cuando en realidad es un instrumento represivo (en su acepción de restrictivo) del grupo dominante.
Y, como se puede comprobar buscando en Internet el significado de Mandato Imperativo, al quedar nuestra representación política -la de los inscritos y votantes a Podemos- en manos de otros que la restringen y limitan, consecuencia de esa teoría jurídica que se llama la "Teoría del Mandato Imperativo" donde las personas, por el hecho de haber votado, ya no tienen derecho a nada hasta al cabo de cuatro años que pueden destituir a aquel señor y votar a otro. Pero mientras aquel señor tiene el "mandato imperativo", que es, repetimos, una entrega de nuestra soberanía, de nuestro poder, de nuestra capacidad de influir en la sociedad..., usan a su capricho nuestra dimensión política.
Nosotros no deseamos, como inscritos y votantes de Podemos, renunciar durante cuatro años a nuestra dimensión política. Por eso los que somos más alternativos tenemos la tendencia a la democracia directa y a suprimir estas delegaciones de representación política.
Este concepto de Alienación Política también describe la siguiente situación que le puede sobrevenir a un sujeto: cuando no se posee a sí mismo, cuando la actividad que realiza le anula, le hace salir de sí mismo y convertirse en otra cosa distinta a la que él mismo propiamente es, decimos que dicho sujeto está alienado; la alienación describe la existencia de una escisión dentro de un sujeto, de un no poseerse totalmente y, como consecuencia de ello, comportarse de un modo contrario a su propio ser.
Dado que nosotros no queremos esto, no queremos ser Alienados Políticos de ningún Consejo de Coordinación ni de ningún Consejo Ciudadano que se blinda a la ciudadanía y trata por Mandato Imperativo de imponer al conjunto de los inscritos de Podemos sus fantasmagorías y espejismos consecuencia de interpretar o contemplar la realidad al margen de la práxis, es decir, de las condiciones reales o materiales de la existencia humana; es por lo que demandamos más democracia interna, más democratizar y ciudadanizar las estructuras organizativas de Podemos, más transparencia y más, mucha más implicación de las personas excluidas de la organización, en especial en la localidad y en la región en la que resido.
Este artículo representa un nuevo tema sobre el que reflexionar. Son ideas que, como siempre digo, dejo a vuestro mejor criterio. Lo positivo de exponerlas y abrir el debate sobre las mismas es evitar temas tabú en una organización que se define como democrática. Espero que os guste el artículo y, lo más importante, deseo recibir vuestras opiniones al respecto. Un abrazo amigos.
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