Cada día estoy más convencido de que las personas progresistas y de izquierda, para serlo, nos debemos de caracterizar por hacer ciencia. Marx quedó establecido como principio aquél que dice que "la clase obrera no tiene ideología que realizar". Todas las ideologías terminan transformándose en algún tipo de teología al degenerar en fantasmagorías. Lo nuestro es ciencia experimental, lo nuestro tiene que ser la constante aplicación del método científico para hacer las cosas (método inductivo, método deductivo y método hipotético-deductivo o de contrastación de hipótesis). Una labor eminentemente práctica y centrada en resultados que satisfagan las necesidades del ser humano (biológicas, fisiológicas y psicológicas) hasta llegar, mediante esa satisfacción, a la plena realización en armonía con el conjunto de la naturaleza. Incluso el comportamiento debemos de tratarlo desde la perspectiva de la ciencia, pues la conducta de cualquier ser humano está determinada por sus consecuencias, por sus contingencias de reforzamiento.
Le decía el otro día a mis amigos, hablando de ciencia, que el instrumentalismo de John Dewey me recuerda mucho a ese herramientismo psicológico de Lev Vigotsky, "el Mozart de la psicología". Es desde esa perspectiva instrumentalista desde la que hablo siempre de Jesús de Nazaret. Además, lo que se dice de Jesús hay que pillarlo con pinzas, pues los evangelios originales se perdieron y Orígenes (Alejandría, 185 - Tiro, 254), considerado uno de los Padres de la Iglesia, nos dice que ya en su tiempo el Mateo primitivo se desconocía. A esto hay que sumarle el proceso por el que pasaron los evangelios en el siglo IV por Rufino de Aquilea y San Jerónimo, lo expreso con sus propias palabras: "Cuando en el texto se encontraba algún pasaje escandaloso, pasó la lima, tradujo y expurgó, de manera que el lector latino no encontrara allí nada que se apartara de la fe".
Parece ser que los Evangelios primitivos, bajo la pluma de expertos falsificadores como Jerónimo o Rufino, fueron manipulados y sacados de contexto.
A todo esto hay que sumarle las acciones llevadas a cabo por iniciativa del emperador Constantino en el Concilio de Nicea (en el que por votación, de resultado muy ajustado, se decidió que Jesús era hijo de Dios) para hacer del cristianismo la religión oficial del Imperio Romano. Entre ellas la confiscación y destrucción de todas las obras que desafiaran las enseñanzas ortodoxas (las establecidas en ese Concilio de Nicea del año 325, claro). En el año 331 encargó y financió nuevas copias de la Biblia, los custodios de la ortodoxia revisaron, modificaron y reescribieron el material como les parecía conveniente de acuerdo con sus intereses. De ahí que de las cinco mil versiones manuscritas del Nuevo Testamento que se conservan en la actualidad, ninguna sea anterior al siglo IV. Referencias: “History of the religions” (E.O. James), “The Messianic Legacy” (M. Baigent, R. Leigh & H. Lincoln), Web Historia UV.es.
"Se confirma así que la Biblia es un producto del hombre y no de Dios, una obra de esencia política, organizada para dejar constancia del mensaje que se consideraba apropiado en la época histórica en que fue escrita", extracto del texto ¿Y si la parte esencial de la Biblia fuera mentira? de Víctor Claudín.
Decía nuestro amigo Joaquín, al hilo de estas palabras, que la iglesia católica siempre ha sido una organización eficaz y despiadada que ha aprovechado ese sentimiento tan humano de indefensión ante la muerte (la propia y la de los seres queridos) para edificar sobre él una maquinaria absolutista e intrusiva en todos los aspectos de la vida de sus creyentes y en los que no lo son. No tiene desperdicio estudiar su historia, está repleta de lecciones de política pragmática bajo el velo de los ideales más dulces. Pero no digo nada nuevo, lo nuevo es que sea público y notorio lo que siempre se ha sabido en todos los pueblos de España, esos curitas que tenían favoritos y favoritas entre los niños y niñas a los que adoctrinaban. Y no podrán cerrar la caja de los truenos que se ha abierto, en estos tiempos, todo se sabe. Y qué decir de Ratzinger, el azote de los dirigentes de la teología de la liberación, el perseguidor implacable de Hans Küng, de Leonardo Boff, de Casaldáliga, algunos de los más brillantes pensadores del siglo xx (y no sólo en la teología, también en la política o la ecología). Su premio, el papado, cuando los dictadores sudamericanos mataban religiosos que pedían justicia para el pueblo pobre y campesino, Ratzinger los perseguía desde el Santo Oficio (llamado modernamente Tribunal para la doctrina de la Fe). No paró hasta que acabó con todos los continuadores y herederos del Concilio Vaticano II (el intento de apertura en la iglesia católica), hasta que se anularon todas las reformas, lo ha conseguido, ha ganado y desde el balcón de San Pedro ve como todo se derrumba...Y, por culpa del sexo, hay una especie de justicia poética en todo esto.
Mira que si después de todo hubiera Dios, no tendría donde esconderse.
Le decía el otro día a mis amigos, hablando de ciencia, que el instrumentalismo de John Dewey me recuerda mucho a ese herramientismo psicológico de Lev Vigotsky, "el Mozart de la psicología". Es desde esa perspectiva instrumentalista desde la que hablo siempre de Jesús de Nazaret. Además, lo que se dice de Jesús hay que pillarlo con pinzas, pues los evangelios originales se perdieron y Orígenes (Alejandría, 185 - Tiro, 254), considerado uno de los Padres de la Iglesia, nos dice que ya en su tiempo el Mateo primitivo se desconocía. A esto hay que sumarle el proceso por el que pasaron los evangelios en el siglo IV por Rufino de Aquilea y San Jerónimo, lo expreso con sus propias palabras: "Cuando en el texto se encontraba algún pasaje escandaloso, pasó la lima, tradujo y expurgó, de manera que el lector latino no encontrara allí nada que se apartara de la fe".
Parece ser que los Evangelios primitivos, bajo la pluma de expertos falsificadores como Jerónimo o Rufino, fueron manipulados y sacados de contexto.
A todo esto hay que sumarle las acciones llevadas a cabo por iniciativa del emperador Constantino en el Concilio de Nicea (en el que por votación, de resultado muy ajustado, se decidió que Jesús era hijo de Dios) para hacer del cristianismo la religión oficial del Imperio Romano. Entre ellas la confiscación y destrucción de todas las obras que desafiaran las enseñanzas ortodoxas (las establecidas en ese Concilio de Nicea del año 325, claro). En el año 331 encargó y financió nuevas copias de la Biblia, los custodios de la ortodoxia revisaron, modificaron y reescribieron el material como les parecía conveniente de acuerdo con sus intereses. De ahí que de las cinco mil versiones manuscritas del Nuevo Testamento que se conservan en la actualidad, ninguna sea anterior al siglo IV. Referencias: “History of the religions” (E.O. James), “The Messianic Legacy” (M. Baigent, R. Leigh & H. Lincoln), Web Historia UV.es.
"Se confirma así que la Biblia es un producto del hombre y no de Dios, una obra de esencia política, organizada para dejar constancia del mensaje que se consideraba apropiado en la época histórica en que fue escrita", extracto del texto ¿Y si la parte esencial de la Biblia fuera mentira? de Víctor Claudín.
Decía nuestro amigo Joaquín, al hilo de estas palabras, que la iglesia católica siempre ha sido una organización eficaz y despiadada que ha aprovechado ese sentimiento tan humano de indefensión ante la muerte (la propia y la de los seres queridos) para edificar sobre él una maquinaria absolutista e intrusiva en todos los aspectos de la vida de sus creyentes y en los que no lo son. No tiene desperdicio estudiar su historia, está repleta de lecciones de política pragmática bajo el velo de los ideales más dulces. Pero no digo nada nuevo, lo nuevo es que sea público y notorio lo que siempre se ha sabido en todos los pueblos de España, esos curitas que tenían favoritos y favoritas entre los niños y niñas a los que adoctrinaban. Y no podrán cerrar la caja de los truenos que se ha abierto, en estos tiempos, todo se sabe. Y qué decir de Ratzinger, el azote de los dirigentes de la teología de la liberación, el perseguidor implacable de Hans Küng, de Leonardo Boff, de Casaldáliga, algunos de los más brillantes pensadores del siglo xx (y no sólo en la teología, también en la política o la ecología). Su premio, el papado, cuando los dictadores sudamericanos mataban religiosos que pedían justicia para el pueblo pobre y campesino, Ratzinger los perseguía desde el Santo Oficio (llamado modernamente Tribunal para la doctrina de la Fe). No paró hasta que acabó con todos los continuadores y herederos del Concilio Vaticano II (el intento de apertura en la iglesia católica), hasta que se anularon todas las reformas, lo ha conseguido, ha ganado y desde el balcón de San Pedro ve como todo se derrumba...Y, por culpa del sexo, hay una especie de justicia poética en todo esto.
Mira que si después de todo hubiera Dios, no tendría donde esconderse.
-o-o- Espacio destinado a la difusión de mensajes de utilidad social -o-o-
La Iglesia Católica en particular, pero supongo que las otras también, es una multinacional de servicios, carente de toda fe en ningún dios que no sea el dios dinero o el dios mercado, porque es que además, son politeistas. Que la Biblia es un libro de aventuras, como el Quijote, no hay ninguna duda, pero como éste, aquella está basada en un hecho real. Es probable que Jesús de Nazaret fuese un personaje histórico con existencia real,individual o colectiva, pero real al fin y al cabo. Y como señalas en tu última frase, si Dios existe, le va a dar lo suyo.
ResponderEliminarLos Evangelios fueron escritos un siglo después de la muerte de Jesús con el fin de intrudicir el cristianismo en el Imperio Romano. Pará qué su utilicen ahora... en todo caso, siempre han sido un instrumento político.
ResponderEliminarEn cuanto a la Iglesia en sí, creo que se debería diferenciar a los cristianso de base de la cúpula (Vaticano y Conferencia Episcopal). Formalmente hay un vínculo jerárquico que no se corresponde con el abismo entre el discurso que hay entre unos y otra. Creo que si la Iglesia puede cambiar en el futuro será por esta disociación: ESPERANDO EL CISMA
Saludos, Javier. Espero que hayas pasado una buena Semana Santa (en su sentido mas profano)
Son una banda de sinvergüenzas, para nada que ver con el presunto bien que, presuntamente, hizo Jesucristo, quien presuntamente existió hace más de 2000 años.
ResponderEliminarLo que me faltaba por oir es a un impresentable, con alzacuellos y sin vergüenza, equiparando el hecho de hacer pública la verdadera calaña de algunos de sus correligionarios con el antisemitismo que derivó en el tristemente conocido holocausto nazi.
La iglesia debería desaparecer, y que cada uno crea en lo que quiera, y que, de una vez por todas, en un Estado que, según dice, aboga por la laicidad, desaparezca la famosa casilla en el impreso de la renta y las ayudas institucionales a un organismo poseedor de uno de los mayores patrimonios de la Humanidad.
Sed felices, si os dejan. Salud y libertad. Fue un placer.
Más que hacer ciencia, deberíamos decir ser crítico. Esa es la clave. Pero amigo JAvier, tú bien sabes que borregos los hay de derechas y de izquierdas. El ser de izquierdas no es un salvoconducto que nos haga más cultos y mejor personas.
ResponderEliminarPero las instituciones quieren, y cuanto más grande más lucharán por ello, borregos. Borregos que les defiendan, que les legitimen que hagan bulto. Bulto para decir: la mayoría de los españoles (cuando la mayoría son 10millones de 40) o en España somos mayoritariamente católicos, cuando las iglesias están vacias.
DE esto hay que huir: de todos los borreguismos. Del borreguismo de la cruz, pero también del borreguismo de la hoz y el martillo, del borreguismo de mcdonals, del borreguismo de gran hermano y operación triunfo. Cunado logremos estos, seremos más libres, más críticos y más autónomos
salud
alfonsovazquez.com
Hola amig@s:
ResponderEliminar- Esquirlas, la verdad es que sí; como sea verdad que Dios existe seguro que no se aburrirá cuando tenga que juzgar a los suyos, entre pederastas y encubridores va para rato. Qué vergüenza de Iglesia.
- David, estoy de acuerdo con lo que planteas; se hace necesario un cisma que renueve a esa casta corrupta que gobierna la Iglesia, las bases cristianas son, afortunadamente, otra cosa; pero deberían de ser más enérgicas y visibilizarse más a la hora de pedir responsabilidades a su jerarquía.
- Rasputín, al final toda estructura termina con los mismos vicios sea esta una Iglesia o un Partido Político. Ojalá lo que dices se haga realidad y que cada cual crea en lo que considere conveniente sin perturbar ni incordiar con sus creencias a los demás.
- Alfonso, ese es uno de los mayores problemas, junto a de toda estructura, el del borreguismo, el de dejar hacer para luego, como siempre, lamentarnos. No terminamos de escarmentar, siempre nos pasa lo mismo cada vez que delegamos, esto es, que nos defraudan. Hay que aborrecer de todo borreguismo, sea este el de la cruz, el del puño y la rosa, el de la gaviota o el de la hoz y el martillo. Hay que ejercer la crítica que es también parte de la ciencia, pues a través de ella hacemos uso de ese principio de falsación tan necesario para descubrir la verdad.
Recibid un muy fuerte abrazote amig@s.
'No es tarea fácil dirigir a hombres; empujarlos, en cambio, es muy sencillo.'
ResponderEliminarSeñores, un gusto leer el artículo y los comentarios. ¡Hay siempre tanto por aprender!
ResponderEliminarHola, coincido en la mayoría de las opiniones aquí vertidas y con vuestro permiso me gustaría manifestar algo que hace tiempo me tiene preocupado.
ResponderEliminarComo todo buen agnóstico que soy, no tengo la menor duda de que La Biblia es obra del hombre y seguramente el mejor producto comercial aun no superado ni por la mismísima Coca Cola.
Ahora bien, tambien soy consciente de que el verdadero peligro para las libertades ha dejado de ser La Inquisición (afortunadamente Torquemada y sus seguidores han desaparecido) y es de la otra parte del charco donde se está fraguando algo verdaderamente peligroso.
Me estoy refiriendo Al Corán que al día de hoy es mucho más intolerante que La Biblia o cualquier otra obra religiosa.
Ocurre que estamos tan distraidos en querer borrar los residuos ya inócuos de nuestro pasado y no nos damos cuenta de lo que se nos avecina a velocidad de vértigo.
Aunque pueda ser molesto reconocerlo y a mi juicio, creo que La Biblia es en la actualidad el único mecanismo que puede contener al fanatismo religioso del Islam y creo que sobran ejemplos.
Solo es una opinion personal y de verdad que me gustaría estar equivocado.
Un cordial saludo
Creo que ya te contesté en el Facebook.
ResponderEliminaresto es un lio tio.
Hola amig@s:
ResponderEliminar- Alfonso, eso es lo que la mayoría de nuestros dirigentes políticos e institucionales hacen, empujar a la ciudadanía; no saben guiarla.
- ElSrM, gracias por tu aportación amigo. Tu también nos enseñas muchas cosas.
- José Manuel, el gran peligro es la miseria; sea esta económica o espiritual. Es ahí dónde se asientan los radicalismos. Mientras no corrijamos esta siempre existirán extremismos que traten (infructuosamente) de limitarlas.
- Malo Malísimo, es verdad, eso es lo que tienen las nuevas tecnologías; que todo se reproduce a una gran velocidad y aparece en lugares y ámbitos diferentes. Gracias por tu aportación en el Facebook, y la de aquí también.
Recibid un muy fuerte abrazote amig@s.
Me alegra poder debatir contigo sobre este tema,
ResponderEliminarJavier y asi poder aclarar algunos puntos que considero necesario que sean de conocimiento público .Es cierto que en 325 E.C.,el emperador romano Constantino el Grande presidió sin ser cristiano presidió el concilio de Nicea,en el que varios desidentes "cristianos" se reunían para debatir entre otras cosas la "divinidad" de Jesús o si solo era el Hijo de Dios afirma-
ción esta que el siempre había reivindicadado,
pero siempre como creación del Padre, inferior a
Él en todo; basta con una simple lectura de los
evangelios, sobre todo del de Juan, para verle
como un hombre que oraba de continuo, ¿a quién?
¿a sí mismo?, por supuesto que no, sino a su pa-
dre y Dios, su creador, del cual enseñaba lo que
había aprendido durante tiempos sin límite a su
lado, al haber sido la primera creación, a El glorificaba y honraba, que no a sí mismo; El fue el primógenito de millones de criaturas ce-
lestiales llamadas ángeles, pero nunca pretendió
ser "Dios". Los apóstoles(enviados) de Jesús ya
advirtieron que el cristianismo se corromperia,
tal como su maestro había predicho también, por
ejemplo 2Pedro2:1,2 dice "Sin embargo llegó a haber falsos profetas entre el pueblo(Israel),
como también habrá falsos maestros entre ustedes
Estos mismísimos introducirán calladamente sec-
tas destructivasy repudiarán hasta el dueño que
los compró, trayendo sobre sí mismos destrucción
acelerada." 2Timoteo4:3,4 "Porque habrá un perío
do en que no soportarán la enseñanza saludable,
sino que de acuerdo con sus propios deseos, acu-
mularán para sí mismos maestros para que les regalen los oidos y apartarán sus oidos de la verdad, puestos que serán desviados a cuentos falso." e incluso "que por causa de sus obras se
jablaría perjudicialmte del camino de la verdad"
Pues bien, en vida de los apóstoles ya
se estaban desarrollando grupos disidentes y
cuando murió el último Apostol, Juan, alrededor
del año 100, el camino quedó libre para la apos
tasia. Y así fué como en 325, en Nicea, el paga-
no Constatino presidió el Concilio entre bandos
divididos y optó por el grupo de los trinitarios
pue tanto en la Roma y Grecia cásicas, así como
en otros paises imperaban conceptos religiosos
y filosóficos que optaron por aceptar el grupo de obispos minoritario, contrario a los arrianos
pero que contaban el apoyo estatal; más tarde en
381 en Constantinopla se ratificó que el espíri-
santo también era Dios y parte del misterioso
dogma de la Trinidad, al cual favorecieron los
emperadores porque en sus religiones también ha-
bía trinidades. A partir de entonces la religi-
on katholika romana empezó a abrazar todas las
costumbres, creencias, parafernalias, fiestas etc, paganas disfrazándolas con nombres cristia-
nos. La Reforma Protestante a parti del s. XV
poco cambió la situación. También a partir del
325 en Nicea la religión empezo a ir del brazo
del estado y los que siglos atras eran persegui-
dos se convirtieron en perseguidores de todos
aquellos que no acataran su ajutoridad, apoyándo
se en el brazo político del estado, situación
que ha continuado hasta ahora en un estado tras
otro. Bueno, Javier, como ahora me he extendido
bastante, dejo para otro momento lo de los manus
critos y la Biblia, y cúando y como se fundó la verdadera iglesia cristiana. Un abrazo.