Como Sísifo, resistiré, resistiré hasta el fin

Extremadura tiene la oportunidad y está en condiciones de cambiar sus veinte siglos de historia. De ser una tierra de la que se van, ahora parece que pasa a ser donde se llega. Algunos están trabajando al menos para eso, a otros parece que le molesta o pasan de largo.

Esto es lo que afirma nuestro Soñador Soñado de Ensueño en su 5x1 de esta semana. Por cierto, por qué nuestro Gargantúa y nuestro Panta no se suman al 5x1; ellos tienen mucho que decir y más que inmortalizar. Son geniales y sus reflexiones brillantes. Así que animo al dúo a que se sume al quinteto y hagamos un septeto.

Paco, cada día estoy más convencido que todos trabajamos para el mismo fin, incluso aquellos que parece que no trabajan, es más, incluso aquellos a los que le molestan los que trabajan o los que pasan de largo. Nuestra función es aprovecharlo todo. Vencer integrando. No integrar para vencer, sino vencer para integrar. La victoria tiene que ir siempre con nosotros.

A los que les molesta que trabajemos están ahí para eso, para ponérnoslo difícil, para subirnos el listón; es por ello que tenemos que estar muy agradecidos. Qué sigan haciéndolo, así nos ejercitaremos mejor; a mejores sean ellos, mejores lograremos ser nosotros cuando los superemos, que debe de ser ¡YA!; pues siempre los hemos de estar superando. Además, el que desee pasar de largo, nosotros lo vamos a implicar activamente; esa es nuestra función. A más quiera pasar de largo, menos hemos de consentir que lo haga. De lo que se trata es de tensar las cuerdas del instrumento. No perder la ligazón. Tampoco tirar en exceso, pues podemos romperlas y el vínculo se deshacería. Nosotros queremos y necesitamos el vínculo. Lo contrario tampoco es bueno, demasiado floja tampoco hace su función.

Recuerdo que quienes necesitan médico son los enfermos. Que no nos trastorne, por tanto, ayudar a los trastornados.

Ayer le decía a Mariana en su blog ¿Por qué nos dejamos determinar? por el pasado o por el futuro. El pasado determina el futuro en la misma medida que el futuro condiciona el pasado. Nuestros sueños, nuestros deseos, nuestras determinaciones, nuestra voluntad condiciona lo que es nuestro presente y, por tanto, lo que será nuestro pasado en igual medida que el pasado también nos marca. La cuestión está en decidir en cada momento que es lo que nos interesa que nos marque más.

Lo bueno es establecer un vínculo sólido y duradero tanto con el pasado como con el futuro, los necesitamos y los queremos; pues de no ser por ellos no seríamos lo que ahora somos.

Le acabo de comentar a Ana, otra amiga Argentina de blog, que el concepto de Dios para Heráclito era el logos; esto es, la razón, el conocimiento puro. Su filosofía combatía el mito. Y, el conocimiento puro, es la contradicción; es la convivencia con la contradicción, es la superación de la contradicción para enfrentarnos a nuevas contradicciones más poderosas y potentes. Nuestra labor es como la de Sísifo. Sísifo, como nos dice la Wikipedia, no quería morir y nunca morirá pero a cambio de un alto precio y no descansará en paz hasta pagarlo. Sísifo es el disco del sol que sale cada mañana y después se hunde bajo el horizonte.

Este es nuestro destino. Albert Camus, también según la Wikipedia, sentía que Sísifo, a pesar de ser ciego, sabía que las vistas del paisaje estaban ahí y debía haberlo encontrado edificante: "Uno debe imaginar feliz a Sísifo", declara, por lo que aparentemente lo salva de su destino suicida. El texto de Camus sobre Sísifo se cierra con un apéndice sobre la obra de Franz Kafka, interpretada finalmente de manera similar, en términos de un esteticismo, a su modo, esperanzador.

Como diría Makinavaja, el último chorizo: a falta de ética nos queda la estética. La cuestión es aferrarse a la vida para vivirla, para padecerla, para sufrirla y amarla. El grupo de heavy/rock español Barón Rojo nos dejaría una de sus letras, esa que enuncia: "resistiré, resistiré hasta el fin".

Recibid un muy fuerte abrazote amig@s.