Dos años desde las últimas elecciones autonómicas

Nos dice Guillermo en su blog que "Hoy hace dos años que más de 350.000 extremeños votaron en las urnas a mi partido en unas elecciones autonómicas para que pudiera ser presidente alguien distinto a quien lo había sido en las seis anteriores ocasiones."

Es mi deseo dejaros aquí el comentario que he dejado a este nuevo post que nos ofrece Guillermo con el título: "27 de Mayo y dos años ya". Espero como siempre vuestras valoraciones y puntos de vista.

Hola amig@ Guillermo, hola amig@s de la Plaza de la Cordialidad:

Enhorabuena por los dos años amigo. Esperemos que gane el Barça.

Resalto la siguiente frase de este post: "Llegué cargado de lo que tenía y de lo que había aprendido en mi vida, a trabajar con pasión y a intentar ser presidente de todos y de todas. Hoy mantengo intacta la ilusión, la pasión y el compromiso."

Yo agradezco ese trabajo, esa pasión, ese ser presidente de tod@s, esa ilusión y ese compromiso.

Sobre defraudar, yo digo lo mismo que Denis Diderot: "No arrepentirse ni hacer reproches a los demás, son los pasos de la sabiduría."

Cada cual llega a dónde llega y puede lo que puede. A mi me gustaría más cambio sin cambio, percibirlo en la forma de hacer de las personas; percibirlo en los responsables de la gestión de los recursos humanos de la Junta de Extremadura, en l@s jefes de unidad, de negociado, de sección, de servicio y en los directores/as generales. L@s trabajadores de la institución no somos números, no somos objetos; somos personas y como tales personas debemos de ser tratados, en este ámbito hay mucho, mucho camino por recorrer; pues no se habla, no se dialoga, no se terminan de superar las relaciones piramidales y verticales; la horizontalidad, el mirarnos a los ojos no existe.

Mi deseo sería que se desbrozara el camino para implantar el sistema de valoración y remuneración por objetivos; en ese momento y consecuencia de los resultados, se percibirá de una forma clara que la gente puede dar mucho más de sí mismo cuando está motivada y se la dinamiza. Para trabajar bien no hacen falta tanta jefatura, tanta burocracia jerárquica; se produce mas y mejor cuando a uno se le estimula y se le paga y valora su trabajo; en estas situaciones hasta se olvida el reloj.

Por cierto, el otro día coincidiste con Buqueras en unas jornadas donde este criticaba el vicio del "presentismo" que es procurar no irse del trabajo antes que el jefe, y resulta a su juicio "tercermundista, puro feudalismo". Ahora le ha dado a mi consejería por fomentarlo, en vez de adaptarse a los nuevos tiempos y evaluar lo que se hace. Estas cosas pasan por tener altos cargos que llevan toda su vida siéndolo; y además siéndolo de forma despreocupada, no reciclada, ni adaptada, ni evaluada.

Pero esto son cosas mías. Son cosas que yo haría. Cada cual es cada cual y emprende lo que entiende más necesario en cada momento. Yo no reprocho nada, simplemente manifiesto deseos.

Finalizo repitiendo las sabias palabras de Ignacio Buqueras: "Hay que trabajar 'por objetivos', con el apoyo tecnológico 'adecuado', y estar 'concienciado' con el trabajo que se hace. Aquella persona que se encuentra a gusto en la empresa, 'que ve y le explican, hay diálogo', es la más rentable."

Recibid un muy fuerte abrazote amig@s.